Los nacidos a partir de 1996 pertenecen a otra generación, ya no son Millennials, sino que forman parte de la “Gen Z”, la generación de la crisis y del Smartphone.
POSITIVO
NEGATIVO
1. Ambiciosos.
Tienen mayor respeto a la formación académica, que los de hace 10 años, aunque piensan en el impacto personal de su trabajo.
1. Ansiosos.
Presentan mayores síntomas de estrés, ansiedad e ideación suicida.
2. Son más familiares.
Por la conectividad están mayor tiempo en casa.
2. Inseguros.
El hecho de estar expuestos a ser juzgados en redes, los hace en mayor medida sentir miedo al ser juzgado.
3. Se comunican mejor.
Debido a la cantidad de medios y formas que tienen a su alcance.
3. Apremiantes.
Debido a la crisis los jóvenes se sienten más presionados por los estudios, la incertidumbre del futuro los agobie o estén reflejando la tensión que han visto en sus casas.
4. Mejor portados.
Estadísticamente se meten en menos peleas, delinquen, fuman, beben y salen menos y vuelven a casa más temprano, que generaciones anteriores a su edad.
4. Cohibidos.
En la red les es más fácil ser ellos, sin sentirse marginados, aunque en su escuela pertenezcas a una minoría.
5. Inclusivos y tolerantes.
Como también están expuestos, renuncian a juzgar a los demás, cuestión que los hace ser tolerantes y especialmente inclusivos.
5. Incómodos por las jerarquías.
Lo que resulta un problema en empresas poco flexibles, donde nadie puede “llevar la contraria”